La importancia de un mentor cuando emprendes un negocio

Albert Camus (1913, Argelia), uno de los escritores más importantes del siglo XX, decía así dando las gracias a su mentor, su maestro de primaria, después de haber ganado el premio Nobel:

Sin usted, la mano afectuosa que tendió al pobre niñito que era yo, sin su enseñanza y ejemplo, nada de esto hubiese sucedido

Un mentor siempre ha sido importante, nadie nace aprendido y en los negocios ocurre lo mismo.  Decides emprender, con lo que cuesta a veces tomar una decisión así, comienzas con ilusión, energía, fuerza y determinación, pero te falta experiencia, puedes ser un experto en lo que vendes pero crear un negocio por primera vez no resulta fácil.

Emprender es un camino solitario, y te vas a encontrar con obstáculos que seguramente tú mismo puedes terminar resolviendo, pero la experiencia de un mentor hará que tomes el atajo, que gastes menos energía, que te motives y que tu negocio despegue en menos tiempo.

Un mentor en el emprendimiento

Un mentor nos guía desde la experiencia, nos enseña los pasos a seguir en el modelo de negocio en el que te estas embarcando. Él ya lo hizo antes, cometió errores, aprendió muchísimo, y desde ahí, ofrece su conocimiento y aprendizaje para que tú vayas directo al éxito.

No sólo te va a guiar en los pasos a dar, también será un apoyo emocional, te ayudará a que confíes en ti mismo y en el proyecto, te dará ese empujón que necesitas cuando la moral se viene abajo, te ayudará a desarrollar tus habilidades, tu capacidad de liderazgo y a sacar a la luz los puntos más fuertes que tienes y que puedes utilizar en tu emprendimiento.

Existe un alto porcentaje de fracaso en las empresas de nueva creación durante el primer año de vida, y cuando pasan diez años sólo queda un tercio de aquellos emprendimientos que empezaron con ilusión y pasión. La presencia de un mentor es crucial durante los primeros años, será la persona que te oriente, te apoye y esté a tu lado. Te asesorará, te escuchará, te dará los mejores consejos y si es necesario, harán que te replantees algunas decisiones para tomar otras más positivas.

No hay que olvidar que el mentor no trabaja por ti. Es como un entrenador, te enseña estrategias, te motiva y te brinda apoyo, como el señor Miyagi en la película de “Karate Kid”.

Cómo elegir a tu mentor

Para elegir a un buen mentor debes escoger a uno que sea experto en tu sector. Si vas a abrir un proyecto social es importante que tu mentor haya tenido experiencia en emprendimientos sociales, por ejemplo.

Dentro de los puntos más importantes donde debe enfocarse el mentor es en el desarrollo, no el rendimiento, se centrará en tu propio desarrollo personal para mejorar tus habilidades.

Uno de los aprendizajes más importantes que puede brindarte un mentor es aprender de él la disciplina del éxito. A mucha gente que emprende le falta motivación y voluntad suficiente para crear hábitos de éxito, así que él es el guía perfecto para enseñarte todo lo que debes incluir en tu día y convertirte en un emprendedor exitoso.

Un buen mentor te enseñará a pensar por ti mismo, no te dirá lo que tienes que pensar.

Otro de los puntos que hay que tener en cuenta a la hora de elegir un mentor es la conexión con él, es decir, el feeling que tengas con él debe ser muy bueno. Si sientes que la relación no será buena mejor busca a otro.

Ventajas de tener un mentor

Muchos emprendedores comienzan solos, y lidian con las peores situaciones como pueden, pero tener a tu lado a un mentor tiene grandes ventajas que os contamos a continuación.

Contactos

Los mentores tienen una red de contactos muy valiosa. Te enseñan también a cultivar tu propia red y abrirte tus propias puertas profesionales.

Aprendes a desarrollar tus propias estrategias

Pensarás que con leerte algunos libros de estrategia de los mejores mentores será suficiente, pero la verdad es que sus mejores estrategias no las cuentan en sus libros. Te ayudará a crearte tus propias estrategias en función de tus necesidades, te transmitirá métodos ya testados y probados y te apoyará en los problemas que puedan surgir. Trabajar con un mentor tiene la ventaja de tener respuestas rápidas y aclaraciones importantes.

Te dará tranquilidad y te ayudará a desarrollar tu inteligencia emocional

La motivación y la confianza en uno mismo pasa por diferentes fases, y algunas de ellas no son muy buenas. El mentor será un estímulo que te dará fuerza para impulsarte cuando lo necesites, te dará serenidad y calma cuando sea necesario y te aportará la perspectiva a que a veces puede perderse.

Los fracasos a veces llegan, y se necesita una mente fuerte para poder vencerlos. Controlar tus emociones será clave para afrontar situaciones complicadas, el mentor te ayudará a tomar decisiones más inteligentes y a lidiar con los problemas. Te llenará la mente de positivismo, de confianza y romperá con tus barreras mentales, con tus limitaciones y temores. Él creerá en ti por encima de todo.

Relación win to win

El mentor nos enseña pero también aprende mucho, es un beneficio en ambas direcciones. Las ideas frescas de las nuevas generaciones, proyectos disruptivos, negocios desafiantes, son ejemplos de nuevos aprendizajes que puede recibir el mentor, es una relación win to win, que termina beneficiando a ambas partes.

Reflexionemos sobre la importancia de los mentores, Yoda en La guerra de las galaxias, el profesor Charles en X-Men, el señor Miyagi en Karate Kid, Mickey Goldmill en Rocky, Gandalf en El señor de los anillos, Pai Mei en Kill Bill, Morfeo en Matrix, o Tyaler en el Club de la lucha, hasta los héroes del cine tenían un mentor.

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